Visto el éxito, en lugar de discutir con el pavo, me fui a otra tienda Movistar. Eran cerca de las 2 de la tarde, y hacía un hambre importante. Llego a la tienda y había un dependiente atendiendo a un señor mayor muy penoso. El hombre quería cambiar de móvil de forma que los contactos de la tarjeta quedaran en la tarjeta y transferir los contactos de la memoria del teléfono al terminal nuevo sin que se mezclaran con los de la tarjeta (no, yo tampoco consigo entender porqué). Había un par de personas esperando, y unas sillas. Viendo que el asunto iba para largo, me senté.
A los 15 o 20 minutos de estar esperando entra una parejita, joven. Él llevaba abundante gomina y un mechoncito en la frente a lo Tintín. Ella llevaba medio pantalón, le faltaban al menos diez centímetros de la cintura para abajo. Vamos, que asomaban sobre el borde superior dos cachas paliduchas, celulíticas y temblorosas de lo más horrendo. Echan un vistazo al percal y empiezan a hacer la maniobra. Nos acercamos con displicencia al mostrador, mira este teléfono, mira este otro, mira qué cucos somos... Llegan dos dependientes, claramente de comer, se ponen a atender a los que esperaban y por fin termina el señor pesao. La parejita se abalanza sobre el dependiente, y detrás voy yo.
- Psss, eh, perdona. Estaba yo primero.
Como si le hubiera llamado perro judío. Se revolvió, rabioso, intentando cargarse de razón por el tal mecanismo.
- ¡¡Eso no son formas!! Hacerme a mí así, y además estaba yo primero...
Interviene el dependiente, para darme la razón, y entra ella también a defender que "psss" es un insulto tan malo que justifica el colarse. Simplemente les ignoré, el dependiente hizo lo mismo, y les dejamos en un ladito despotricando, mientras le cuento mi rollo y me informa que el único teléfono que puede servirme de algo es el Iphone. Se me vuelve a encender el consumismo atroz.
Hago la contraoferta: ¿y la Blackberry?
- Bueno, sí, podría valer. Pero con los puntos que tienes te sale por porrotocientos euros.
Me ahorro decirle que siempre será menos que el Iphone. Me recomienda que llame a Movistar a ver si me regalan los puntos o algo.
Al salir, me muerdo muchísimo la lengua y consigo no decirle a la chavala:
- Nena, que se te ve la hucha...
Hija, Cordelia, es que mira que decirles Pssss... Seguro que si fiches lo de la hucha primero te dejan tranquila. Ja, ja, ja!!!!! No se cuanto costara el iPhone por tu barrio, pero vele lo que cuesta. Yo ya no tengo otro tfno. Ni BB ni ná.
ResponderEliminarPues cuesta un pastón que no tengo, básicamente. Seguro que lo vale, lo sé. Pero como no puedo, pues yatá.
ResponderEliminarBueno pues te diré que mi hijo tiene n Samsung muy chulo que me salió gratis con contrato de dos años. Again, aquí la telefonía movil funciona de otra manera. A lo que voy: el Samsung es la mar de chulo y seguro que tiene lo que buscas. Good luck!;-)
ResponderEliminar¿hay un "me mata III?
ResponderEliminarLo de los móviles te ahorra tiempo ... por un lado. Pero el tiempo que dedicas a arreglar temas de contrato o buscar el dichoso tfo, lo pagas a alto precio de paciencia¡¡¡
Hay un III (y dado que ahora mismo estoy hablando con Movistar por un asunto del fijo, igual hay un IV)
ResponderEliminarEspero que no haya un V, por el bien de tu salud mental¡¡
ResponderEliminarHace unos años llamé a telefonica para quejarme de un fallo del adsl de la empresa (3 dias sin y se alargaba).
Despues de 10 minutos, por decirle a la chica "menuda cara" me montó un pollo. Dijo que la había insultado, que yo era una maleducada y bla bla bla. Sospecho que quería que yo colgara; me da que ellos no pueden finalizar la conversación, solo puede el cliente
Ánimo, tú puedes¡¡¡
Miriam